Para este juego, sólo se necesita un palo o una tiza. El espacio para jugar deberá ser en el interior pero amplio o en el exterior. Es un juego adaptado para los tres años. Se desarrolla la atención y la psicomotricidad gruesa. El juego se dispone de la siguiente manera, se hace una ralla con la tiza o se pone un palo y se diferencian así el mar o la montaña. El adulto va diciendo ¡mar! o ¡montaña! y los niños debrán saltar un lado o al otro. Y cada vez se va diciendo más rápido para ir añadiendo más dificultad.